Siempre alabado por millares de seguidores, la expedición con los jugadores, técnicos y dirigentes del club acudió primero a la Catedral de Madrid, donde ofreció el trofeo a la Virgen de la Almudena, patrona de la capital española e hizo sendas paradas en la sede del Ayuntamiento y de la Comunidad, donde fueron agasajados por la alcaldesa, Ana Botella, y la presidenta del Gobierno madrileño, Esperanza Aguirre. Ambas no dudaron en enfundarse las camisetas con el número 12 que les regaló el club.
La celebración en Neptuno marcó el éxtasis final de los festejos por la conquista de la Liga Europa, con miles de aficionados rojiblancos que desbordaron el lugar de celebraciones del Atlético de Madrid y coparon las calles adyacentes.
Durante todo el recorrido, los grandes protagonistas fueron el brasileño Diego Ribas, al que los aficionados pidieron que no se vaya, al estar cedido por el Wolfsburgo alemán, el colombiano Radamel Falcao, el héroe de la final al marcar dos goles, y el técnico argentino Diego ‘Cholo' Simeone, el ídolo de los fanáticos del Atlético.