Cuando el segundo clásico del 2012, válido por la fecha 8 de la Copa Postobón, jugaba el complemento, un lío entre las hinchadas por el robo de unas banderas ocasionó una invasión del campo.
En ese momento, tanto la terna arbitral como los jugadores de América se fueron a los camerinos convocados por el técnico Eduardo Lara. Los del Deportivo Cali permanecieron en el campo.
Transcurridos más de 45 minutos de suspensión, la Dimayor a nombre del gerente Iván Novela confirmó desde Bogotá que había garantías para continuar, pero el árbitro Diego Escalante pensó lo contrario y dio por terminado el cotejo.
Más tarde se confirmó que el encuentro terminaba 0-0 y quedaba a espera de una determinación de la Dimayor, que seguramente sancionará a ambas escuadras.
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"Vimos una falencia en la seguridad en el inicio del segundo tiempo, por eso como capitán del equipo arbitral decidí no continuar el partido", afirmó Escalante a DirecTV. "No podiamos garantizar que no iba a volver una invasión", agregó el colegiado.
Este es el segundo clásico vallecaucano desde que América descendió el año pasado a la segunda división. Los ‘diablos rojos' son segundos del grupo E parcialmente con 16 puntos, cinco más que el Deportivo Cali.
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