El delantero uruguayo dejó el choque visto para sentencia con dos disparos cruzados en los minutos 24 y 28 de la primera parte y remató la faena en el 82 al marcar, desde unos pasos más allá de la línea del centro del campo, uno de los goles más vistosos de la temporada en Inglaterra.
Los ‘reds' llegaban este sábado a Norwich en busca, más que de puntos, de moral de cara al trascendental partido contra los ‘blues' del próximo sábado, que podría maquillar una temporada irregular en la que se mantienen octavos en la Premier League, lejos de los puestos europeos.
El Norwich, por su parte, tampoco saltó al césped con la necesidad imperiosa de sumar puntos, ya que su decimocuarta posición parece asegurarle un final de curso apacible.
La derrota frente al West Bromwich la pasada semana (0-1) sirvió de estímulo para los de Kenny Dalglish, que esta tarde se mostraron motivados desde los primeros compases de un partido en el que los locales parecían dejarse arrastrar por las circunstancias.
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Mientras el argentino Maxi Rodríguez y el uruguayo Sebastián Coates descansaban en el banquillo, Suárez volvía a erigirse como líder de los ‘reds' y desatascaba el duelo poco después de los veinte minutos de juego.
El inglés Steven Gerrard recuperó un balón en el centro del campo, avanzó con él pegado al pie y esperó hasta que el uruguayo estuvo en la posición adecuada para recibir el esférico en el interior del área.
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Con ventaja frente a los defensores del Norwich, Suárez pudo levantar la cabeza y descerrajar un tiro cruzado hacia el segundo palo que hizo inútil el esfuerzo del guardameta inglés John Ruddy por estirarse para alcanzar el balón.
Inspirado, el uruguayo, que acumula 17 goles esta temporada, no tardó más de cinco minutos en enviar por segunda vez el esférico a la red.
En esta ocasión, fue él mismo quien avanzó por la banda izquierda con el cuero controlado y se internó en el área para volver a cruzar el balón a Ruddy, esta vez desde el lado contrario.
En el segundo tiempo, al Liverpool parecía sobrarle energía y Suárez se mostraba determinado a lograr el tercero ante un cuadro local descentrado que no acertaba a crear peligro en la meta del español Pepe Reina.
Los ‘reds' aprovechaban la velocidad de un césped húmedo y en perfectas condiciones para lanzar rápidos embates, y el delantero uruguayo volvió a disfrutar de una ocasión clara de gol al filo del minuto sesenta, cuando ensayó una vaselina que terminó saliendo por encima del larguero.
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La fortuna le volvió a sonreír finalmente a falta de ocho minutos para el final, cuando el uruguayo, campeón de la Copa América con su selección el pasado verano, vio adelantado a Ruddy desde el centro del campo y no dudó en probar suerte con un larguísimo balón que acabó, esta vez sí, en la red.