Las imágenes de más de una decena de jirafas muertas en Kenia debido a la sequía son perturbadoras y dolorosas. La gravedad de este fenómeno, según informó BBC, puede ser peor.
Los cadáveres fueron encontrados en el Centro de Conservación de Vida Silvestre de Sabuli.
Pero no son los únicos animales que son víctimas de la sequía en Kenia, pues también hay ganado que, al no tener qué pastar, fallece por el hambre.
“La pérdida es devastadora, no puedo hacer nada para salvarlos. Es la voluntad de Dios. Solo rezo para que la lluvia, el ganado lo es todo para mí”, dice Ahmed Ibrahim, uno de los afectados por el cambio climático que mata a jirafas y otros animales.
En septiembre de 2021, el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, declaró desastre nacional por las sequías y se comprometió a hacer lo posible para controlar la emergencia de la que también son víctimas los habitantes.