Una mujer sembró el caos entre sus vecinos al querer espantar un perro que había aparecido de repente. Cansada con su presencia, lanzó azufre a las escaleras para que no volviera el canino.
Según Meganoticias , el medio chileno que reportó el caso, la señora se arrepintió y lanzó agua para retirar el químico, pero la reacción acabó afectando a los demás residentes.
Al menos diez vecinos manifestaron náuseas, vómito y dolor de cabeza por la mezcla. Entre los afectados hubo menores de edad asmáticos, lo que empeoró la situación.
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Aunque la emergencia no fue grave, le quedó la lección a esta mujer por intentar espantar un perro con azufre. Y parece que se arrepintió, pues dijo un líder comunal que ella se autoincriminó cuando llegaron los bomberos.
Varias familias tuvieron que pasar parte de la noche fuera de sus casas por culpa de este acto de intolerancia.
