Los protestantes recorrieron las polvorientas calles de Necoclí, una localidad ubicada en el Urabá antioqueño, para reclamar a las autoridades que les permitan partir hacia Panamá.
En sus manos exhibían ramas tomadas de un árbol de la zona y arengaban cánticos tradicionales de sus países y otros aprendidos en Colombia.
Argumentan que el municipio ya no los puede ayudar más. Entre ellos hay 74 niños y 14 mujeres en estado de embarazo.
Los migrantes llevan más de 4 meses varados en este municipio debido a la pandemia.