"A la luz de los indicadores vamos mejorando, pero tenemos hechos lamentables como el del centro comercial o el edificio en Usaquén. Son hechos que debemos controlar porque no se trata de tener buenas estadísticas y mala percepción", aseguró Claudia López.
Y agregó: “Siete de cada diez homicidios están ocurriendo en siete localidades; se amerita tener una concentración de esfuerzo en esas siete. Eso no quiere decir que vamos a dejar de proteger a toda la ciudad”.
Con base en esa idea, explicó que ahora la vigilancia, operación e investigación que normalmente es fija –“atada por igual a los cuadrantes”- se flexibilizará para que se focalice la operación en territorios con más homicidios y hurtos.
Insistió en que Bogotá será la primera ciudad en implementar este modelo de la mano de la Policía Nacional y el Ministerio de Defensa.
San Cristóbal, Rafael Uribe, Ciudad Bolívar, Bosa, Kennedy, Suba y Los Martíres, son las localidades donde se prestará especial atención.
También habló sobre cambios en la manera de denunciar.
“Van a dejar de llamar a CAI. Todas las denuncias se van a recibir en el 123, se va a volver un centro de despacho de reacción mucho más eficaz", prometió.
Sobre la polémica con el gobierno, la mandataria matizó y sostuvo que no estaba culpando a nadie, pero sí recalcó que las escuelas de formación de Policía están cerradas, lo que afecta los planes sobre aumentos en pie de fuerza.