A este camión se lo tragó la tierra, pero ese no fue el peor problema

El vehículo de desechos sólidos quedó atorado en una calle del centro del mercado público de Santa Marta. La gente suplicó que lo remolcaran pronto por su olor.

Un par de placas de concreto no soportó el peso del camión, que permaneció varias horas en el lugar expeliendo un aroma nauseabundo.

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