El exprecandidato presidencial Camilo Romero fue llamado a juicio disciplinario por la Procuraduría General de la Nación, por hechos ocurridos cuando se desempeñó como gobernador de Nariño.
Camilo Romero deberá responder por las presuntas irregularidades de un contrato que se firmó en 2016 por 18 mil millones de pesos para la compraventa de 80.000 cajas de Aguardiente Nariño.
La Procuraduría considera que Romero no hizo la debida vigilancia administrativa del contrato, que fue firmado por su secretario de Hacienda y quien habría manipulado los precios de venta del licor. Esto habría causado afectación a las finanzas del departamento.
Por este mismo caso, la Corte Suprema de Justicia le ha seguido un proceso que está en etapa de juicio.