Los extranjeros han bloqueado vías para pedir que sean llevados a la frontera y, así, puedan retornar a su país.
Como si se tratara de un albergue o un campo de refugiados, cientos de migrantes permanecen peligrosamente aglomerados en época de coronavirus COVID-19. Ellos buscan volver a su país, pues la situación de cuarentena ha afectado sus ingresos.
“Hay mujeres embarazadas, hay bastantes niños pequeños juntos con sus familias, bastantes personas de la tercera edad, jóvenes y adultos que queremos, obviamente, cruzar a Venezuela”, explica José Clavijo, uno de los que busca regresar.
A manera de manifestación, han bloqueado las vías para exigir que los lleven en buses hasta la frontera.
“Van 72 horas y no nos dan respuesta. Si no nos van a hacer el traslado, deben prever un plan b”, señaló otro de los manifestantes.
La Policía realiza controles para organizar a los extranjeros, sin embargo, calculan que unos 30 caminantes, muchos con niños, llegan cada hora.
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