Moreno, que podría pagar siete años de cárcel por los delitos de celebración indebida de contratos y cohecho, se quedará por ahora en el búnker de la Fiscalía.
El ente judicial pidió que el expresidente del Concejo de Bogotá sea recluido en La Picota o la Modelo.
Sin embargo, su defensa, Darío Bazzani, reveló que su cliente "tiene una enfermedad de carácter progresivo y mortal" y "es incompatible con la retención", pero no indicó qué padece.
Explicó que, tras aceptar su responsabilidad en el carrusel, Moreno aún no ha establecido "los términos concretos de la colaboración" para el caso.
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Dijo que esta "no está condicionada", "no se trata de un preacuerdo" y "él simplemente acepta los cargos".
Dentro de lo que Moreno podría destapar para avanzar con la investigación del carrusel, está la comisión del 10% a la que se refirió Emilio Tapia, "que finalmente disminuyó al 9% y en últimas no se supo cómo se distribuyó esa comisión", explicó Bazzani.
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"Ojalá Hipólito Moreno represente el fin de una forma de hacer política en Bogotá, profundamente ligada al chantaje y la corrupción", trinó el alcalde Gustavo Petro.