Conozca los cuatro tipos de deudas que parecen sacadas de películas de terror

Si usted es víctima de alguno de estos, el consejo es no endeudarse más y buscar, con la ayuda de un experto, la manera de ir saliendo de deudas.

Deudas momia: Son aquellas que seguimos pagando mucho después de haberlas consumido. Por ejemplo, una cena o un producto que ya no lo tenemos.

Deudas zombis: aquellas que parecen inmortales. Ya ni recordamos cuándo las empezamos a pagar, y aunque cada mes abonamos, parece que nunca se acaban.

Deudas monstruosas: aquellas cuyo pago mensual se nos lleva el 30% o más de nuestros ingresos, o nos hacen estar en mora ante la entidad bancaria.

Deudas Frankenstein: Son los préstamos que contraemos para pagar otra deuda. Ese carrusel se convierte en un verdadero desangre financiero.

 

"