Hago este post con el reto de no irme a la fácil de hacer el balance de la Liga Águila 2015-I para @MillosFCoficial cuando termine su participación (ojalá campeón). Para mi, aquellos que en algún momento fueron referentes para la tribuna, deben mantener una relación de respeto mutuo con el equipo e hinchada que los dio a conocer y apoyó. Me animo para tocar un asunto sobre el cual muchos me mandaran sus más intestinos deseos de mala suerte al tratarse de la actual relación de Andrés Pérez con la hinchada de Millonarios. O pueda que estén de acuerdo. Desde el disenso se enriquece el análisis. ¿En qué momento se acabó nuestra relación con él? ¿Desde cuándo fue que todo desembocó en un odio acérrimo como si nos hubiera robado algo de nuestras vidas? ¿Por qué cada vez que viene a El Campín una parte de la tribuna, y ahora casi toda, lo putea como si hubiera cometido un crimen? ¿Ha ofendido nuestra historia? ¿Ha ofendido nuestros colores? No termino de entender. Algo tiene que ver las administraciones anteriores a Azul / Blanco S.A. por dejarlo ir en 2009 porque sigue siendo un muy buen jugador. Andrés Pérez siempre fue muy querido, para muchos idolatrado por nuestra tribuna. Fue nuestro capitán muchísimas veces, era un tipo de un carisma con la tribuna azul y blanco a toda prueba. "Capitaaaaan, capitaaaaan, vamos, vamos, capitaaaan", se oía cuando al sonar los himnos, se izaban las banderas frente a lateral norte. Claro, se pensaba que el día que enfrentara a Millonarios en el Campín saludara a la tribuna, tal como lo ocurrió con Héctor Burguez y con Carlos Ángel López. No pasó nunca. Más bien la tribuna interpretó, y un poco Pérez con su indiferencia, contribuyó a que creciera un rechazo creciente hacia él. A esto, se han sumado tres hechos que a los hinchas de Millonarios no nos supo nada bien: 1. Que dijera públicamente que era hincha del Deportivo Cali, luego de haberlo visto besando nuestro escudo, nuestros colores. Ahí ya vamos mal. 2. Que nos hiciera un gol definitivo en la Liga Postobón 2014-II en el Pascual Guerrero para dejar el partido 4-3 en contra de Millonarios y que lo celebrara a rabiar. 3. Que en este play-off en el partido de ida en El Campín, nos hiciera un gol (un golazo, además) y lo celebrara con sus compañeros. Es difícil para el hincha azul entender que un jugador aparentemente identificado con Millonarios le grite un gol. También no es menos cierto que un jugador tiene el fútbol como su fuente de trabajo y se debe a su patrón. Pero muchos creemos en los códigos en el fútbol, aplicables para muchos aspectos de la vida; para las relaciones con la gente, para no meterse con la novia o ex-novia de un amigo, guardarle secretos a los amigos, ser agradecido con quien lo apoyó a uno en sus comienzos, en fin. Códigos. Eso, los códigos, es lo que el hincha promedio de Millonarios identifica en esta situación: falta de códigos. Y en el fútbol, gritarle un gol al antiguo equipo no cuadra mucho, no es bien visto. Nunca se vio a Martín Palermo jugando para Boca gritarle un gol a Estudiantes, a Ariel Ortega jugando para Newell's gritarle un gol a River o al propio Pocho Insúa anotarle a Independiente. Entiendo un poco al hincha en la frustración que esto genera aunque no hago parte activa de la puteada desde la tribuna, ni lo haré en casos de jugadores que en su momento entregó su esfuerzo sincero a los objetivos (logrados o no logrados) de Millonarios. Como en el caso de Andrés Pérez. Sí, en su momento él se entregó totalmente por nuestros colores y hay que decirlo. Aparece en nuestro álbum en la sección de ídolos, nada menos. Ahora, un mensaje muy respetuoso para Pérez: Si existe algún resentimiento contra nuestra institución o un directivo porque le quedaron debiendo plata o contra un Director Técnico que no lo tuvo en cuenta y por eso se fue al Deportivo Cali y allá sí lo valoraron, hermano, dígalo claro. Grite los goles contra el rival que sea, triunfe, gane la plata que se merece porque es su trabajo que lo hace muy bien. Pero ver que una relación que se debía mantener en el marco del respeto mutuo se ha deteriorado así, no merece la pena. Hay que ver la manera en que la gloriosa hinchada de Millonarios respeta, entiende y acepta que nuestro actual capitán, todo un ídolo azul, sea hincha del equipo al cual le marcó un golazo para el 3-2 de Mayo 28 de 2015. Y aun así, que los hinchas del Deportivo Cali lo quieran como uno de los suyos. Hay diferencias, evidentemente. Que cada quien juzgue el asunto.
Actualizado: enero 25, 2017 11:51 a. m.