

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Justo en el día en el que el astro brasileño Ronaldo Nazário llegó a sus 49 años, este 22 de septiembre; en el fútbol de ascenso de Bolivia un tocayo del temible goleador de paso por Barcelona, Real Madrid e Inter, entre otros, sigue con su lucha corriendo detrás de un balón e intentando trascender y consolidarse en su carrera deportiva.
Este Ronaldo es de apellido Ariza y no nació en Río de Janeiro, sino en Bogotá un 17 de enero de 1998 y tiene 27 años. Aunque pasó por clubes como el desaparecido Alianza Petrolera y por Cúcuta Deportivo, y por equipos de ascenso en México, Brasil y Paraguay; para este segundo semestre el 'Ronnie' colombiano aceptó una propuesta para defender los colores de Libertad FC, de la B de Bolivia.
"Me preguntan que porqué me pusieron Ronaldo, cosas así, pero nunca en el fútbol me han hecho mucho bullying por llevar el nombre. Fue mi papá (Pedro Ariza) el que me puso así y la verdad no sabía que Ronaldo 'fenómeno' estaba cumpliendo años (este 22 de septiembre)", dijo inicialmente Ariza, en contacto con Gol Caracol.
En su adolescencia, Ronaldo estuvo en Selección Colombia. Primero en la Sub-15 bajo la orientación de Jorge 'Chamo' Serna y en la Sub-17 con Camilo Pérez, además de microciclos con la juvenil. Esos dulces momentos aún los recuerda como si fuera ayer, con participación en Sudamericanos en Bolivia y Paraguay, en los Juegos Odesur de Chile ganando el oro y la Copa de las Naciones de México.
Publicidad
"En esas selecciones jugué con Jorge Carrascal, Jhon Janer Lucumí, el central zurdo; con Carlos Cuesta, con el volante Juan Camilo Portilla y Edwin Cetré, el que anda por Estudiantes de Argentina. Eso fue algo inolvidable", relató el mediapunta o extremo de buena condición técnica y que ya acumula 2 goles en el balompié del altiplano.
A la hora de analizar su camino en el fútbol profesional, también aprovechó para contar algunas de sus verdades. "El fútbol tiene muchas situaciones, pero hay que seguir dando la pelea. En México, cuando fui a Tepatitlán F.C. me pude quedar, tuve ofertas de otros clubes, pero al final no se dio. La persona que me estaba manejando tomó una mala decisión y me quedé sin el pan y sin el queso. Me he alejado de empresarios, me han jugado malas pasadas. Y en Colombia, en pandemia al Cúcuta lo desafiliaron y empecé con las experiencias internacionales. Lastimosamente no me he podido consolidar".
Publicidad
Ahora en pleno 2025, Ronaldo Ariza aceptó irse a vivir su aventura boliviana, en donde no todo es color de rosa. "Acá no es fácil, algunas de las ciudades tiene un altura fuerte, es un poco más desorganizada que el fútbol colombiano, pero acá estamos. Hay algunos buenos equipos, jugadores que quieren llegar a la primera división y otros que ya jugaron, desean regresar. El tema del dinero y los pagos es complicado, pero ahí vamos. Yo estoy hace poco acá; pero uno escucha que se tienen retrasos", finalizó el Ronaldo bogotano que no tira la toalla, en pro de trascender en el fútbol.