Hay quienes no están satisfechos con nada, los que viven de maltratar en el periodismo y también se cuentan los hinchas que no ceden en sus prejuicios. La actual selección Colombia sirve para hacerles a todos ellos un buen llamado de atención. Se criticaba la falta de gol y Falcao les hizo dos a los bolivianos. Se dijo que a Costa Rica había que ganarle y se logró. Se esperaba un buen papel ante Argentina y ahora es innegable que en ese partido se demostró que hay con qué construir futuro. No es bueno caer en apologías ni en críticas eternas. La selección quedó primera de su grupo en la Copa América, no perdió ningún partido y no lamentó ninguna anotación en contra, contando en ello que su portero titular ha sido el suplente “Neco” Martínez. Esa es la realidad no interpretada. El equipo es equipo. Y hay una idea de estilo basada en el famoso 4-1-4-1. Se juega a algo reconocible, guste o no, y lo que importa es que con eso se puede pelear un lugar a Brasil 2014. Hay más cosas positivas. El gesto de mostrar el saco del arquero lesionado David Ospina en la celebración de uno de los tantos contra Bolivia también refleja valores muy importantes, como el compañerismo y la solidaridad. Fue lo mismo que aplaudió el mundo cuando Barcelona dejó que Abidal, quien había sido operado de un cáncer de hígado, levantara el pasado trofeo de la Liga de Campeones como capitán. Estar en la otra corriente es fácil. Se puede resaltar que para las opciones creadas apenas se han convertido tres goles. Que falta tener más tiempo el balón y, si se quiere, que los rivales han estado en un nivel regular y que lo que importa es lo que viene, es decir, los cuartos de final en la Copa América y las Eliminatorias, que están a la vuelta de la esquina. Lo anterior es cierto. Sin embargo, en la competencia real, sin mirar los amistosos, se ven más pros que contras en la selección Colombia. “Bolillo” confiesa que tiene fe y ojalá no la pierda en un disparate en una rueda de prensa. El presidente Santos, que vio el partido en el departamento del Cauca, dejó de hablar de las FARC para llamar al técnico y expresarle sus felicitaciones. “¡Este equipo cada vez me gusta más!”, manifestó por su parte Juan Pablo Ángel. Como ellos, muchos reconocen hoy las virtudes del equipo nacional. Exagerarlas o creérselas demasiado sí será un problema, pues nada ha ganado Colombia realmente en estos tres partidos de primera ronda. Esto que festejamos es moral, tan solo un inicio. Pero vale su reconocimiento, mucho más que la crítica malsana y preconcebida. En Twitter: @javieraborda
Actualizado: enero 25, 2017 02:42 p. m.