El mono volvió. Muchos años pasaron para volverlo a ver en nuestra casa a Ricardo Lunari. Con solo 6 meses el argentino nos enamoró con goles y buen fútbol. Ese subtítulo lo celebramos como una estrella, con recibimiento por la calle 26 y fiesta en el parqueadero del Campín. Jorge Franco dijo que no había dinero para retenerlo e hicimos una vaca en medio del vino ese día. Puse dos mil pesos para que se quedara. Los sueños del hincha. Ahora soy menos cándido que en esos días. Mi amor por Millonarios (y la edad) me ha vuelto más reflexivo y menos exitista que en aquellos días. A lo mejor menos optimista y soñador. Una persona que quiere a Millonarios como el profe Lunari, es sin duda lo que siempre uno soñaría como director técnico de Millonarios. Un profundo sentido de pertenencia, aceptación general de la hinchada y ganas de triunfar. Pero visto que con la misma pasión que creamos ídolos los destruimos, es preciso que pensemos nosotros los hinchas, que nos puede dar Ricardo Lunarí en el 2015. Porque más allá de la pasión hay que ver el modelo futbolístico que ofrece Lunarí. Es imposible medir su capacidad real con este equipo. Pero si podemos ver señas de quien es como técnico Ricardo Lunari. Lo primero es que ha sentado a vacas sagradas del vestuario y eso es una buena señal. Va a mandar en el camerino y ya sabe quiénes no deben seguir en Millonarios. Ya en el terreno se ve su vocación ofensiva. 16 goles han marcado los azules, promedio de 2 goles por partido vs 0.75 goles por partido que tuvo el equipo de Lillo este semestre. Logró recuperar a Uribe y Reina se ve más suelto al lado de Mayer y no en una banda como se utilizaba al principio. Atrás no hay mayor cambio. 1.88 goles por partido aunque se logró sacar en 0 tres veces al arco. El funcionamiento sigue siendo irregular y por momentos los jugadores no saben cuál es su rol en la defensa. Las transiciones son rápidas pero desordenadas y los relevos en la mitad se quedan cortos. Todo esto envuelto en un pobre nivel de todos los jugadores. El más regular ha sido Cadavid. Lo que me inquieta del profe Lunari es su lectura de los partidos. En Pereira, Cali y contra el DIM falto mano del técnico. Los balones parados parecieran que no se trabajaran. Los cambios fueron un problema más que una solución. Las variantes tácticas fueron nulas. Cuando los jugadores no dan, se espera que la mano del técnico se note en el equipo. Estos dos partidos son por cumplir. Sí la opción, digna del primer milagro de la Madre Laura, de clasificar a los cuadrangulares se da esperamos ver cómo logra motivar y luchar por hacer una presentación digna de la historia azul. No dudo del profesionalismo de Lunari pero guardo mis reservas sobre su capacidad como timonel del equipo más grande del país. Guardando las distancias, Pep y Mourinho salieron avantes en sus primeras experiencias como técnicos. Pero los casos de fracaso también están ahí. Esperemos que elija bien a los refuerzos y que mejore en las fallas vistas. Ya no es el mono: estamos en manos del Profe Lunari. MINUTO FINAL: Los refuerzos tienen que llegar rápido. La institución necesita recursos y los abonos no tendrán fuerza sin que lleguen jugadores (buenos jugadores) rápido. A ponerse las pilas Gustavo Serpa. MAURICIO GORDILLO GUEVARA @MAUGOR
Actualizado: enero 25, 2017 02:49 p. m.