Falcao rompió la maldición y Colombia volvió a celebrar

El juego amistoso, primero del combinado de mayores en la plaza deportiva de Palmira, Valle del Cauca, mostró a un equipo ansioso de tantos y repleto de méritos para por fin "destrozar" la maldición que tantas penas había generado en las Eliminatorias Suramericanas al Mundial.

Eduardo Lara debutó como técnico oficial del equipo y probó a 17 de los 20 jugadores convocados. Su plantilla hizo la tarea con arqueros (Agustín Julio y David Ospina) con pocas exigencias, un sistema defensivo impecable y una zona de volantes ordenada.

Carlos Darwin Quintero y Falcao García, los delanteros elegidos para este duelo, hicieron todo hasta por fin alcanzar la meta.

El zaguero Luis Amaranto Perea estrelló un balón contra el larguero en el minuto 18 de la primera parte, Quintero "rompió" cinturas en la zaga contraria y lo intento de cerca y de lejos, Freddy Guarín lanzó "misiles" desde afuera del área, Camilo Zúñiga se proyectó una y otra vez en busca de un rematador, pero nada parecía suficiente.

Nigeria aguantaba la "avalancha" gracias a su portero Austine, hasta que en el minuto 37 de la segunda mitad García, el "artillero" del River Plate de Argentina, clavó el puntillazo final.

Tras habilitación de Sergio Herrera, el número "9" burló al "cuidapalos" y remató a puerta vacía. Colombia no ganaba tres puntos, ni la clasificación a una próxima instancia. Colombia derrotaba a los "fantasmas" y se demostraba a sí misma que sí es posible triunfar.

Desde el 14 de junio de este año la escuadra absoluta no sabía lo que era un festejo. En esa ocasión, gracias a Hugo Rodallega, los "cafeteros" empataron 1-1 frente a Perú en el estadio Nacional de Lima.

Ojalá haya terminado la mala racha y Eduardo Lara, con su primer triunfo al frente del equipo, siga insistiendo en fútbol, tantos y confianza. La plantilla rinde en cada una de sus líneas. Pecando en el festejo por una victoria "amistosa", quedó claro que Colombia sí puede.

Palmira (Valle del Cauca)