Un empate a cero entre ambos equipos igualaría el global de la eliminatoria y obligaría a ambos equipos a jugarse la clasificación a semifinales desde el punto de penalti, por lo que el técnico Massimiliano Allegri prefirió que algunos de sus jugadores afinaran su puntería desde los once metros.
Los tres elegidos: Zlatan Ibrahimovic, Kevin Prince Boateng y el brasileño Robinho, quienes durante cerca de diez minutos probaron varios disparos desde el punto de pena máxima.
Solo un empate sin goles llevaría a ambos equipos a disputarse la clasificación en la tanda de lanzamientos, ya que un empate con goles otorgaría el pase al Milan por el valor doble de los goles en campo contrario.