Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Push Gol Caracol
Reciba nuestras notificaciones con lo último de:
No, gracias.
¡Claro que sí!

Publicidad

Muy ruidosos son los hinchas de La Equidad

[flv image="http://blogs.golcaracol.com/muchaspelotas/files/2011/06/Techoestadio.jpg"]http://static.caracoltv.com/v/n/2011/06/bc9815c7659e0242f240fa349de950d3.flv[/flv] La tribuna occidental sur del estadio de Techo parecía un trancón camionero en la final ante Nacional. Varios hinchas del equipo bogotano llevaron sus trompetas y las soplaron repetidamente antes, durante y después del partido. Quizá sea el tiempo el que lo vuelve a uno cansón, pero creo que esas ‘vuvuzelas’ colombianas que suenan a pito de carro deberían estar prohibidas. Primero, porque incomodan al espectador y, segundo, porque su ruido lo deja a uno sordo, con dolor de cabeza y le baja estatus al espectáculo que muchas veces no lo es. Hay que estar en contra de ese bochinche. Aunque es pacífico, no es ideal en vivo y tampoco cuando se ve por televisión. Es desesperante. En la reciente final en Techo, por ejemplo, un agradable aficionado de La Equidad intentó muchas veces tocar con su instrumento la ranchera con la que comienzan todas las serenatas. Lo peor es que estas trompetas se oyen también en el Guillermo Plazas Alcid de Neiva, en el Manuel Murillo Toro de Ibagué y otras plazas de Colombia. Alguien me dijo, y creo que con razón, que esa bulla le recordaba el fútbol peruano. ¿A eso nos queremos parecer? En el estadio se puede gritar, cantar y saltar. Es suficiente ya con los tambores como para meterle ahora trompetas. Si va a ser así, que lleguen aficionados con guitarras y maracas. Será mejor que ver violencia en las tribunas, pero entonces ya no iremos a ver fútbol sino a bailar. Puede seguirme en Twitter en: @javieraborda Cuidado si dice groserías en el estadio

  • Publicidad