Guaraní apretó el acelerador desde el inicio del cotejo buscando el arco rival para intentar anular la ventaja pero la defensa de River Plate se mantuvo sólida. El cuadro visitante, al darse cuenta que su adversario descuidaba la defensa en su afán ofensivo, llevó un par de contraataques aunque no con la suficiente eficacia como para definir.
Fernando Fernández consiguió el gol local a los 61 minutos aprovechando una confusión frente al arco rival luego que el balón rebotara en el palo izquierdo tras un cabezazo de Marcelo Palau. Fernández estuvo a punto de lograr su segunda conquista a los 68', pero su cabezazo fue interceptado por Carlos Sánchez sobre la línea final.
El empate fue firmado por Alario a los 79' lanzando el balón por encima del portero Alfredo Aguilar quien salía desesperadamente para intentar frenar al delantero.
"Teníamos muchas ansias de jugar una nueva final luego de muchos años", aseveró Gallardo, agregando que "el partido lo tuvimos controlado, en general, pese a que en el primer tiempo hubo acciones peligrosas para ambos".
Gallardo le dio más profundidad a los ataques de su equipo con el ingreso del uruguayo Tabaré Viudez por Gonzalo Martínez a los 69 minutos. "Viudez no es muy conocido pero le di confianza porque conozco la capacidad que tiene", comentó el entrenador.
Alario, de 22 años, expresó que apenas lleva un mes en el plantel "pero los compañeros me dieron mucho respaldo y pude definir con el pase de Tabaré (Viudez)".
El cuadro de la banda roja enfrentará al ganador de la otra semifinal entre el mexicano Tigres e Internacional de Brasil a disputarse el miércoles en Monterrey.
River Plate avanzó a la final gracias a la ventaja de su triunfo por 2-0 en el juego de ida, la semana pasada en Buenos Aires.
El equipo argentino dirigido por su ex jugador Marcelo Gallardo ganó la Copa Libertadores en 1986 y 1996, mientras que perdió las finales de 1966 y 1976.