Diego 'Pulpo' González es el hombre de Boca Juniors que estuvo implicado en las dos acciones de gol que el VAR le anuló a los 'xeneizes' en la serie de octavos de final contra Atlético Mineiro, en que quedaron eliminados.
En el juego de ida, en La Bombonera, quedó señalado de empujar al defensor del conjunto brasilero, en la acción previa al gol que él mismo convirtió y que el juez colombiano Andrés Rojas invalidó al ser llamado por el VAR. En el duelo de vuelta, en el estadio Mineirao, fue el futbolista que está unos centímetros adelantados y que vició la jugada en que Marcelo Weigant marcó.
“La verdad estamos con bronca, hubo cosas muy raras. Nosotros dentro del campo de juego respetamos a todo el mundo y sentimos que nos faltaron al respeto. La terna arbitral de la semana pasado y la de hoy. No logro entender cómo los árbitros piden que saquen y que si se acercan, amonestan. Es una falta de respeto al deporte, al juego, porque nosotros estamos trabajando mucho y nos duele mucho que nos hagan estas cosas. Nos parece que la Conmebol debe revisar más el tema de las ternas arbitrales”, manifestó González, notablemente molesto.
“Sin duda el arbitraje tiene que ver con la eliminación de Boca, está a la vista de todos. Metimos un gol lícito y la verdad que merecíamos ser justos ganadores del primer partido. Nosotros trabajamos para poder darle alegría a nuestra gente y no le pudimos dar esa felicadad, por esta cargada que están implementando y que no sirve para nada. Sino que pongan robots y seguramente van estar más contentos”, concluyo el mediocampista 'xeneize'.
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Luego de eso, la delegación de Boca Juniors tuvo enfrentamientos con la policía, en la zona mixta del estadio Mineirao, en los que hasta hubo gases lacrimógenos.