El gesto de CR7 y el resto de sus jugadores llegó después de la sesión de entrenamiento de este domingo.
"Vinimos aquí (al exterior del centro de entrenamiento de Marcoussis) para agradecer el apoyo que nos habéis dado. Todavía no ganamos nada, pero intentaremos darlo todo en las semifinales y la final. Continúen con este apoyo que sentimos. Estamos muy orgullosos. Muchas gracias", afirmó Cristiano Ronaldo, micrófono en mano, desatando los aplausos del alrededor de 500 aficionados congregados en el lugar.
La euforia fue total cuando Cristiano Ronaldo y otros jugadores se acercaron a los aficionados, muchos de ellos vestidos con camisetas de Portugal o con banderas del país, y firmaron autógrafos y se hicieron 'selfies'.
Los aficionados estaban separados de la zona de los jugadores por una valla de seguridad, en una calle en la que se había cortado previamente el tráfico. Agentes de la gendarmería vigilaron en todo momento el acercamiento de los futbolistas a la multitud para evitar cualquier tipo de incidente.
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Cristiano Ronaldo tuvo un gesto especial con un niño en una silla de ruedas, vestido con una camiseta de Portugal y con una gorra en la que se leía "CR7". Firmó su camiseta y habló un instante con él.
Ricardo Quaresma, uno de los jugadores favoritos de la hinchada portuguesa, fue otro de los más solicitados por los aficionados en el momento de los autógrafos y las fotografías.
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