La policia de Rotterdam confirmó haber utilizado un cañón de agua para dispersar a un grupo de "varias decenas" de alborotadores en las proximidades del estadio De Kuip, en la ciudad portuaria, antes del "Klassieker" que enfrentó al Ajax Amsterdam y al Feyenoord este domingo.
Hubo 64 personas por "violencia", se anunció a lo largo del domingo. El partido fue ganado por el Ajax por 2 a 0.
Una portavoz de la ciudad confirmó antes del partido a la AFP que la situación estaba "bajo tensión".
Según la agencia de prensa holandesa ANP, el autobús del Ajax fue atacado con bengalas a su llegada al estadio.
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Siempre según ANP, un grupo de 100 a 150 personas lanzó también bengalas y botellas a la policía y un "puñado de personas" fueron detenidas.
La confrontación, que se desarrolló a puerta cerrada debido a las restricciones sanitarias, ha sido más explosiva debido a la presencia del exjugador del Feyenoord, Steven Berghuis, cuyo traspaso al Ajax esta temporada fue muy criticado.
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El Feyenoord Rotterdam tiene la reputación de contar con algunos de los aficionados más violentos de Europa. Hooligans fueron identificados en actos violentos en la ciudad en enero y finales de noviembre de 2021.
Holanda está desde el domingo en "confinamiento", durante el período de fiestas navideñas, para intentar detener la quinta ola de Covid-19 y la fuerte progresión de la variante Omicron.