Una valiente mujer, dueña de un perrito de dos meses, no dudó en actuar cuando vio que el animal era víctima de una pitón en Queensland, Australia .
Jasper disfrutaba tranquilamente en un patio cuando fue blanco de la serpiente. El animal lo tomó en sus fauces y empezó a enrollarlo, como comúnmente lo hacen.
Michelle van Schlouwen, la propietaria, intentó golpear al depredador con un rollo de papel que tenía a la mano, pero evidentemente eso no funcionó.
Consciente que todo podía terminar mal en cuestión de segundos, tomó el gélido cuerpo del reptil y lo sacudió hasta lograr que soltara a Jasper.
Finalmente, logró salvar al perro y le curó las heridas. Por fortuna, solo tenía un mordisco en la oreja y un pulmón golpeado.
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