En video, quedó registrado cómo un buen samaritano auxilió al animal y lo liberó de un carrete de hilo de pescar abandonado en el mar y que amenazaba su vida.
El guía turístico y kayakista Naude Dreyer había intentado atrapar a la foca en cinco oportunidades durante la misma semana, pero ella se escabullía, temerosa de que le hicieran daño.
La perseverancia de este hombre dio frutos y, por fin, Dreyer logró cogerla por la cola, ponerla contra el suelo y quitarle el aro plástico con hilo de pesca.
No fue fácil. La foca intentó morder al kayakista que, hábilmente, la esquivó y redujo, para luego liberarla de esta basura arrojada por humanos y que mata a miles de animales.
La escena fue captada en la bahía de Walvis, en Namibia.