A través de Facebook, Analía Jensen denunció la amarga experiencia que vivió en un local en Mar del Plata, Argentina.
El embrollo se originó cuando ella solicitó a una mesera un cuchillo con filo que le permitiera cortar fácilmente un filete de carne y, al ver la factura, le habían cobrado 200 pesos argentinos (el equivalente a unos 40.000 pesos colombianos) solo por darle los cubiertos.
"Cuando le preguntamos a la camarera de qué se trataba, balbuceando y sin mucha consistencia, trató de explicar que eran los cuchillos para el bife de chorizo que habíamos pedido", escribió Jensen.
En medio de la indignación, la mujer exigió que si iba a pagar por los cuchillos al menos tendría el derecho de llevárselos a la casa.
Tras la petición, la empleada debió consultar a sus jefes quienes accedieron “generosamente” a no cobrarlos.
"Son cosas increíbles que aunque no parezcan ciertas, pasan", concluyó en su denuncia Analía Jensen.