Zhou Xiaozhou, de 13 años, solo les contó a sus padres lo que pasaba después de perder tres exámenes, porque su maestro tampoco dejaba que los presentara.
El lamentable caso fue dado a conocer por el papá del pequeño, diagnosticado con un linfoma no Hodgkin.
Zhou estudia en una escuela en Quinzhou, Fujian.
“Te imaginas lo que pasaba por la mente de mi hijo? (…) Se ve obligado a sentarse ahí como si fuera tonto. ¡Qué triste debe haber sido!”, comentó el padre del niño al hacer pública una imagen en redes sociales.
Según el menor, nunca contó lo que pasaba para no preocupar a sus papás.
El profesor, que también era el subdirector de la escuela, fue suspendido, según informó el Ministerio de Educación de Fujian.