Dos hombres armados intentaron ingresar a robar en una vivienda de Indiana, Estados Unidos . Trataron de tumbar el portón a la fuerza, pero huyeron repentinamente sin explicación aparente.
Tras revisar las cámaras de seguridad, residentes descubrieron que a uno de los sujetos se le había activado el arma y se había autoinfligido un disparo en la pierna.
Los propietarios de la vivienda esperaron al día siguiente para dar aviso a las autoridades, que hicieron las pesquisas alrededor del inmueble y hallaron un proyectil.
Sin embargo, media hora después del robo, la Policía había recibido el aviso de un hospital por un paciente con herida de arma de fuego. Se trataba de Keanu Cook, un joven de 18 años que había estado involucrado en el intento de hurto.
Ahora lo acusan de robo con armas y porte de la misma sin salvoconducto. Confesó que había ido con su compañero en busca de “droga, hierba y cosas valiosas”, indicó un medio local.
