Con un megáfono en la mano y el corazón partido, busca entre los escombros de un edificio. Esta es solo una de las muchas historias que conmueven hoy al mundo.
Los rescatistas que están a su lado de la mujer, conmovidos, levantan las manos y aprietan los puños para pedir silencio. Confían en que los hijos escucharán la voz de la mamá y darán una señal de vida.
Como ella, son decenas de mujeres -madres, esposas e hijas - las que esperan encontrar sanos y salvos a sus familiares y hacer solo una cosa: abrazarlos y no soltarlos jamás.
Y es que, entre tanta muerte, la vida sí que toma peso y valor. Cada rescate es una victoria.
La solidaridad no se detiene. Seguidores del Club León, un equipo de fútbol mexicano, cargan donaciones en medio de cantos.
La siguiente imagen resume el sentir de quienes creen que, en una tragedia , toda vida es sagrada.
El perro se llama 'Yaco' y estaba aislado en el cuarto piso de un edificio roto, a punto de derrumbarse. Con una cuerda, y desde una ventana, socorristas lo salvaron.
Vea tambien:
#FuerzaMéxico: bebé que nació en la calle es hoy símbolo de vida en...