El Ojo de la Noche registró el pasado martes un accidente de tránsito que ocurrió en el barrio Laureles, en Engativá. Un taxi se estrelló contra una casa y sus ocupantes salieron corriendo, sin importarles el vehículo.
Aunque una de las hipótesis era que el conductor iba ebrio, el seguimiento al caso permitió determinar que en el taxi de placas WPO 563 se movilizaban cuatro delincuentes que habían acabado de asaltar a don Nicolás Pinzón.
“Cuando sentí un leñazo en la espalda. Dos personas, una me haló la bicicleta y el otro me mandó una puñalada al pecho. Salté y siguieron con la bicicleta”, le contó la víctima del hurto al Ojo de la Noche.
Luego de esto un ladrón se va montado en ella y el resto de la banda se sube al taxi que, cuadras más adelante, resultó contra la fachada de una casa.
El vehículo quedó en los patios, pero no aparece ningún responsable que responda por los daños a la vivienda ni por el hurto al ciudadano.
La víctima logró contactar a la propietaria del taxi, quien afirma no tener idea de lo que hacían con el vehículo, aunque estaba en poder de alguien “de confianza”.