La URI de Puente Aranda fue escenario de una preocupante aglomeración entre capturados por hechos delictivos, policías, víctimas de accidentes laborales y de accidentes de tránsito. La razón, un solo médico hace las valoraciones.
La peor parte la llevan los uniformados, pues pueden permanecer hasta 15 horas con un detenido esperando a que le realicen el chequeo. Algunos dicen que les representa gasto de tiempo y dinero porque compran comida, pues no pueden dejar ayunando a los sospechosos de algún delito.
Algunos dicen que esto afecta el tema de las capturas, pues saben el engorroso proceso al que se someten si llegan a la URI de Puente Aranda y les toca esperar hasta la madrugada para que reciban su caso.
Hacen un llamado a las autoridades competentes para dar solución a esta situación y así poder realizar un trabajo efectivo contra la inseguridad.
También piden no olvidar la pandemia y que la aglomeración puede ser una fuente de contagio de coronavirus .
