Pequeña jugaba a la varita mágica con una aguja de tejer, se cayó y se la enterró en el cerebro

Los médicos la bautizaron como ‘La niña más afortunada del mundo’, pues logró vivir y sobreponerse a las lesiones sin daños posteriores.

La imaginación de la niña la llevó a jugar con este artículo de coser fingiendo que se trataba de un mágico artefacto. Desafortunadamente, lejos de hacer magia, por poco ocurre una tragedia.

La pequeña, de 3 años, saltaba en la cama y perdió el equilibrio. Su aterrizaje fue doloroso: la aguja penetró por el paladar y alcanzó la base del cráneo.

Los escaneos mostraron que el elemento había llegado al centro de su cerebro, a través de la glándula pituitaria.

Por delicado que suene, la niña no tuvo daños tan graves.

Los especialistas le apodaron ‘la niña más afortunada del mundo’, pues aproximadamente el 70-90 por ciento de las víctimas de este tipo de accidentes muere antes de llegar al hospital.

Y la mitad de los que sobreviven mueren en las clínicas más tarde, escribieron los doctores en el International Journal of Pediatric Otorhinolaryngology Case Reports  .

También detallaron que el objeto “viajó a través del hueso justo detrás de los ojos, a través de la glándula pituitaria y el hueso que lo protege, y terminó en el lado derecho del tálamo”.

La aguja, que generó hemorragias y secreción de líquido cefalorraquídeo, solo generó la aparición de meningitis bacteriana que pudo ser mortal, pero fue una “complicación menor”.

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