La mujer, que dice se trató de una retaliación por parte del plantel, fue escuchada por autoridades que resolvieron a favor de los derechos de los estudiantes.
De acuerdo con María Fernanda Serna, por reportar anomalías en el colegio de sus hijos, de 7 y 11 años, directivos de la institución en Popayán les quitaron los cupos que habían ganado por sus calificaciones para acceder a este año lectivo.
"La denuncia que yo presenté fue de que ahí en el colegio Bicentenario hay profesores que no tienen todavía la licenciatura. La petición que yo hago es que no permitan que dejen a mis hijos sin estudio simplemente por el hecho de que denuncié las irregularidades", afirma la madre.
El tema fue analizado entre directivos del establecimiento escolar y delegados de la Secretaría de de Educación de la capital del Cauca.
"Ante todo es hacer respetar el derecho a la educación que tienen los niños, desde ese punto de vista ya, en una decisión consensuada, los estudiantes continúan en el colegio y comenzamos un proceso con la madre de familia para solucionar unos inconvenientes", explicó Carlos Calero, supervisor de la Secretaría en mención.
Aunque el colegio no se pronunciará frente al caso, sus directivos indicaron que se acogerán a la orientación del ente territorial.