El presidente de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) , Eduardo Cifuentes, entregó alarmantes cifras sobre el homicidio de líderes sociales y excombatientes de las FARC desde que se firmó el acuerdo de paz con la extinta guerrilla en noviembre de 2016.
De acuerdo con al magistrado, 904 líderes y 276 exguerrilleros han sido asesinados. Esta situación pone en riesgo a las víctimas del conflicto armado y también su reparación.
“Los atentados contra quienes participan activamente en el proceso de paz anulan el presupuesto indispensable para su cabal desarrollo, la confianza”, aseguró.
Puntualizó que “cuando los violentos silencian a los defensores de derechos humanos y exintegrantes de las FARC-EP no solo los lastiman a ellos y a sus familias, privan también a la sociedad de un irreemplazable fragmento de verdad y una fuente de reparación”.
Por eso, la JEP le pidió a la Defensoría del Pueblo que formule recomendaciones a las instituciones del Estado y la sociedad que permitan poner fin a esta grave situación.
La Defensoría respondió y aseguró que hasta el momento se han emitido 186 alertas tempranas justamente para evitar los asesinatos.
