El presidente de los Juegos Olímpicos hizo una desesperada petición ante tensionante situación

El presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos (COJO) de París, Tony Estanguet, pidió este miércoles una "tregua" a los trabajadores de diversos sectores, entre ellos el del transporte, ante las posibles huelgas de este verano durante la cita deportiva.

"Quiero que recibamos al mundo en las mejores condiciones posibles y que no estropeemos la fiesta", declaró Estanguet al canal estatal France 2.

Desde hace varios meses, sindicatos de transportes, policías y sanitarios amenazan con realizar huelgas entre la inauguración de la cita olímpica, el 26 de julio, hasta principios de septiembre para compensar las vacaciones aplazadas y las horas extraordinarias del verano.

El malestar ha sido parcialmente resuelto en el sector policial, para el que el ministro del Interior, Gérald Darmanin, anunció a finales de enero una prima de hasta 1.900 euros para los policías y gendarmes que trabajan en la región de Île-de-France, donde está París.

En transportes, los sindicatos mayoritarios de la empresa estatal de ferrocarriles SNCF y de la compañía que agrupa el transporte público de París (RATP) ya notificaron un preaviso de huelga hasta el final de los Juegos Paralímpicos, que concluirán el 8 de septiembre.

En cambio, el ministro de Transportes, Patrice Vergriete, aseguró en la emisora pública France Inter no estar "en absoluto preocupado", porque "no habrá huelgas".

Fedegolf

"No creo ni por un momento que los trabajadores, los asalariados o los sindicatos pongan en peligro la imagen de Francia o la imagen de su empresa ante el mundo entero", vaticinó.

A su parecer, esta manera de proceder "no forma parte en absoluto de la cultura obrera, apegada a la imagen de la empresa y del país cuando se es un trabajador o sindicalista".

Para contener las convocatorias de huelga en fechas clave como los JJ.OO., el Ejecutivo francés barajó llevar a cabo una reforma del derecho de huelga, que Vergriete ha negado que "por el momento" se vaya a poner en marcha.

Para Vergriete la reforma es el "último recurso", por lo que prefirió "apelar a la responsabilidad" y comunicó que se reunirá con los sindicatos "en breve".