Los resultados financieros del Everton para la temporada 2021/22 revelaron el viernes una pérdida de 44,7 millones de libras (55,2 millones de dólares) con el club ya bajo escrutinio por presuntas infracciones de las normas financieras.
El club de Merseyside fue remitido por la Premier League la semana pasada a una comisión independiente de las normas de rentabilidad y sostenibilidad de la liga para el período que finaliza con la temporada 2021/22.
El reglamento permite a los clubes perder un máximo de 105 millones de libras en un periodo de tres años o enfrentarse a sanciones, que pueden incluir la deducción de puntos.
Sin embargo, a los clubes se les permitió descontar las pérdidas causadas por la pandemia del coronavirus, y el Everton alegó que el comercio de jugadores se vio afectado por la crisis, así como los ingresos por partidos durante dicha temporada.
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Las pérdidas del Everton en los tres años anteriores a la temporada pasada fueron de 371,8 millones de libras.
El Burnley, descendido de la máxima categoría del fútbol inglés la temporada pasada, y el Leeds escribieron a la Premier League en mayo para cuestionar cómo el Everton se había mantenido dentro de las normas al evitar el descenso por sólo cuatro puntos.
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Esta temporada, la permanencia de los Toffees en la máxima categoría durante 69 años vuelve a estar en peligro, ya que se sitúan sólo dos puntos por encima de la zona de descenso.
Una deducción de puntos podría hundir sus aspiraciones de supervivencia, y el Daily Mail informó el viernes de que podría llegarse a una resolución antes del final de la temporada.
El Everton ha negado rotundamente la acusación de incumplimiento de las normas.
"El club confía en seguir cumpliendo todas las normas y reglamentos financieros de la Premier League y siempre les ha facilitado información de forma abierta y transparente", declaró el presidente Bill Kenwright en el informe anual del club.
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El Everton consiguió al menos reducir sus pérdidas en 76 millones de libras la temporada pasada, ayudado por la venta del internacional brasileño Richarlison al Tottenham por 60 millones.
La deuda neta se elevó a 141,7 millones de libras debido a las inversiones en la plantilla y a los costes asociados a la construcción del nuevo estadio del club en Bramley-Moore Dock.
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Desde el cierre del ejercicio, el propietario Farhad Moshiri ha proporcionado 70 millones de libras adicionales de apoyo financiero que se utilizarán para el desarrollo del estadio y las necesidades de liquidez operativa.