El tribunal de arbitramento de la Cámara de Comercio de Bogotá acaba de ordenarle a la Dimayor pagarle cerca de $23.000 millones a Claro y UNE por haberle quitado los derechos de transmisión del campeonato colombiano que estas dos empresas de cable tuvieron hasta junio de 2012, lo que representa un golpe tremendo para las finanzas de la asociación de clubes del fútbol profesional colombiano y a la imagen de su hasta hace poco presidente Ramón Jesurún, hoy nuevo presidente de la Federación Colombiana de Fútbol gracias al "FIFAgate" que llevó a la renuncia de Luis Bedoya. Hagamos memoria: antes de que existiera WIN, el famoso canal "que todos queremos" y que transmite cada jornada la totalidad de partidos de la Liga y al menos uno de la segunda división, el FPC era transmitido desde 2004 por dos cableoperadores, los dos más grandes del país en cuanto a número de suscriptores: Claro (entonces llamado Telmex) y UNE. El director general de estas transmisiones era Mauricio Correa, hoy cabeza de WIN, quien le llevó el negocio a DirecTV cambiando el modelo con el montaje de un canal exclusivo. La empresa de TV satelital anunció en junio del 2011 que desde el siguiente año transmitiría el fútbol profesional colombiano y que en su señal se podrían ver TODOS los partidos de la fecha, y a partir de ese momento comenzó una batalla llegal y un tire y afloje que tuvo hoy su final. Eso de transmitir todos los partidos de cada fecha fue el argumento con el que la Dimayor decidió no renovar su contrato con Claro y UNE (a pesar de una cláusula de preferencia), pues el alegato de la dirigencia del fútbol, encabezada por Jesurún, era que no se estaban dando todos los partidos y que por tanto la oferta de DirecTV era mejor para los aficionados. Ahora bien, el tribunal de arbitramento de la Cámara de Comercio de Bogotá acaba de decidir que ese diferencial fue prefabricado por Dimayor, que en últimas es la que programaba partidos simultáneos para impedir que Claro y UNE pudieran dar todos los juegos de la fecha, con lo que el argumento para no renovar el contrato de los derechos de TV de Claro y UNE no es válido. Mejor dicho, en colombiano, que Dimayor debe responderle a Claro y UNE por casi $23.000 millones ya que los derechos de TV les fueron despojados irreglamentariamente. Uno de los argumentos básicos de los abogados de Claro y UNE está en la presencia de Mauricio Correa como cabeza de las transmisiones del FPC con ellos y luego como cabeza de WIN, y tiene toda la lógica del mundo, es decir: ¿cómo es que un día administras a un lado y al otro día administras en la competencia que te perjudicó? Pero bueno, no entremos en detalles... Lo irónico es que DirecTV montó junto a RCN el canal WIN Sports en 2012 y sólo hasta este año éste llegó a la parrilla de Claro y UNE en un negocio multimillonario del que, sin embargo, sólo el 23% le llega a los equipos de fútbol pues el resto se va en gastos operativos y de producción (es decir, en mantener el canal) . Lo que se viene es un nuevo pleito legal y más plata pues esta indemnización es sólo por una cláusula que se violó... qué lindo el chicharrón que le heredó Jesurún a su sucesor Perdomo. Eso es lo que yo llamo una"Dimayorada" En Twitter: @pinocalad
Actualizado: enero 25, 2017 02:40 p. m.