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El deportista estaba cansado de que las continuas molestias lo alejaran de las canchas. Ahora espera recuperarse para comenzar la temporada a tiempo.
Con tan solo 21 años, Angus Crichton es una de las jóvenes estrellas del South Sydney. Lastimosamente su corta carrera ha estado marcada por las continuas lesiones en el dedo corazón de su mano izquierda.
Desde muy joven, Crichton se ha torcido y fracturado ese dedo por lo que se veía obligado a alejarse de las canchas con mucha frecuencia. “Me lesionaba el dedo muy seguido. Desde antes de que cumpliera 20 tengo ese problema, tanto así que tuvieron que fusionar los huesos. Me quedé sin articulación en ese dedo”, cuenta la joven estrella.
Las constantes cirugías de poco sirvieron, cada vez que volvía a jugar, se lesionaba de nuevo.
“Me operaban a cada rato porque se seguía rompiendo (el dedo). Ahora no puedo doblarlo, cuando apretó el puño pareciera que estoy haciendo la grosería”, afirma Crichton sobre su lastimado dedo.
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Después de haber pasado por cuatro cirugías para reparar la extremidad, el joven volvió a las canchas.
Desafortunadamente a los pocos partidos se volvió a fracturar el dedo. En esa ocasión la recuperación iba a tardar tres meses por lo que decidió acabar el problema de raíz: “El doctor había dicho que podía cortarlo o fusionarlo. Yo decidí que lo amputara ya que estaba cansado de esto”.
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David Rawlings, técnico de South Sydney, ha confirmado el procedimiento al que se sometió su jugador. Ahora Angus Crichton espera poder jugar sin ningún problema la temporada 2018 de la liga nacional de Rugby australiano.