Quienes han tenido a un ser querido con la enfermedad de Alzheimer
saben lo cruel que puede llegar a ser este padecimiento que borra tantos recuerdos; sin embargo, el destino da giros inesperados, como en el caso de Kelly Gunderson.
El alzhéimer privó a la madre de Kelly, de 87 años, de sus sentimientos más profundos. Borró de un trazo sus recuerdos familiares, como quiénes son sus hijos o cómo era su vida en casa.
Su hija, que lleva años visitándola, no había perdido la esperanza de que ella la reconociera algún día. Y ese día llegó.
Kelly grababa con su celular uno de los tantos encuentros con su progenitora, cuando la mujer mayor pronunció el nombre de su hija amada.
Lo que viene a continuación es un diálogo que conmueve hasta las lágrimas. Aquí, un fragmento:
>>Mamá: Te amo.
>>Hija: Pero, ¿sabes quién soy?
>>Mamá: Sí.
>>Hija: ¿Quién?
>>Mamá: Ah, Kelly.
>>Hija: Sí, mamá. Sí, soy Kelly.
>>Mamá: Yo amo a Kelly. ¿Acaso no te llamé Kelly?
>>Hija: Sí, lo hiciste.
>>Mamá: Bueno, yo te amo Kelly.
>>Hija: Yo te amo, mamá.
Para fortuna de Kelly, la conversación quedó grabada en este video
tan impactante como enternecedor.
Este es el helado que nadie quiere comer
Julie Bresnan grababa un video casero cuando a su helado le cayó un ingrediente inesperado: excremento de pájaro. El episodio, sin embargo, no terminó ahí.
Lo peor es que Julie no se percató de la adición, porque en ese momento había girado su cabeza para describir el paisaje. Al regresar a la cámara, se llevó de nuevo el helado a la boca.
Unos segundos más tarde -y como si esto no fuera suficiente- recibió una descarga completa del pájaro que posaba sobre el árbol que ella había escogido para que le diera sombra. ¡Doble mala suerte!
You gotta watch this woman unknowingly eat bird poop off her ice cream cone http://t.co/G0JOPAmF56 pic.twitter.com/LyUsGpU0Hu— The Great Epicurean (@GreatEpicurean) septiembre 1, 2014
Julie, finalmente, lo tomó con humor y decidió compartir este video
al mundo que hoy suma un millón seiscientas mil visitas.