Yongki, un conocido elefante de un parque natural de Indonesia, fue hallado sin vida con los colmillos arrancados, confirmó un responsable del parque nacional de Bukit Barisan Selatan. Su muerte desató una ola de indignación en las redes sociales.
Mientras haya quien compre la muerte habrá quien mate por ella.#Yongki pic.twitter.com/3ZLHR1lu1k
— ༒•Marcos García C.•༒ (@Marcogar7) September 22, 2015
El animal, que trabajaba con un equipo de cuidadores del parque, era un elefante de Sumatra, especie en extinción.
Fue hallado sin sus colmillos, al parecer cortados con motosierra. Yongki era un animal protegido, pero esto no detuvo a sus asesinos.
Se calcula que solo quedan unos 3.000 de estos elefantes en libertad, bajo la amenaza constante de los cazadores furtivos que les matan y venden sus colmillos a precio de oro para ser usados en la medicina tradicional china.
Su cuerpo sin vida no tenía balas, lo que podría indicar que fue envenenado.
¡Cojan a la rata! Se busca a esta ladrona de pizzas
Advertencia: este video no es apto para los que sufren de musofobia, un miedo anormal a los ratones. La escena es corta, pero contundente: una pequeña rata arrastra un pedazo de pizza que la triplica en tamaño por las escaleras de una estación del metro en Manhattan, Nueva York.
El usuario Matt Little la subió a internet y las redes sociales estallaron. La etiqueta #PizzaRat se convirtió rápidamente en tendencia:
New York's hottest Halloween costume has arrived #pizzarat pic.twitter.com/AhWEPCcBbn
— Brian Ries (@moneyries) September 21, 2015
En tan solo 24 horas, el video superaba los dos millones de reproducciones.
Una dura lección: niño aprende a soplar velitas justo el día de su cumpleaños
El deseo más grande de un niño que acaba de cumplir dos años es apagar la velita que adorna su pastel. Su nombre es Marty, pero el arte de soplar le ha sido esquivo.
Sus padres nunca sospecharon que al niño le faltara esta lección, y todos se dieron cuenta muy tarde, cuando la velita seguía encendida, pese a los intentos del pequeño por extinguir la llama.
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Al final, al padre de Marty se le ocurre una gran idea y el niño logra lo que parecía imposible. ¡Feliz cumpleaños!