Atholl Mills volvió a encontrar el camino del amor propio después de varios años de luchar contra lo que veía en el espejo. Nació con higroma quístico , una especie de protuberancia bajo la piel que ha afectado parte de su cabeza, rostro y cuello en el lado izquierdo.
Los comentarios que soportó durante su niñez y adolescencia lastimaron su autoestima, pero un día Mills decidió ignorar esas voces.
“Cuando dejé de escuchar lo que otras personas decían, descubrí que tenía el potencial para amarme de verdad”, comentó este influencer británico de 24 años.
Y en su proceso para recuperar el amor propio, Atholl Mills empezó a tomarse una foto diaria y decirle cosas agradables. “Esto me ayudó a sentirme mejor por mi apariencia”, sostuvo.
El joven británico Atholl Mills trabaja con una organización benéfica dedicada a personas con apariencias diferentes.
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