Un individuo de 32 años, identificado como Kevin Justin Mayorga, de la localidad de Cutler Bay, al sur de Miami, en Florida, Estados Unidos, se enfrenta a varios cargos después de que la Policía lo detuviera por decapitar con sus propios dientes a una serpiente que era la mascota del hogar. Ocurrió durante una disputa doméstica que el indiciado tuvo con su pareja.
El hombre fue arrestado después de que agentes de la Policía de Miami-Dade acudieran al complejo de apartamentos Saga Bay Gardens tras recibir información sobre un altercado familiar.
Al llegar, descubrieron que el sujeto había decapitado a la serpiente, una pitón real.
El informe policial señala que los agentes, al entrar en la residencia, encontraron a Kevin Justin Mayorga tratando de retener a su pareja, por lo que, tras recibir una advertencia, trataron de reducirlo, pero se opuso con violencia.
La mujer le dijo a la Policía que Mayorga había mordido la cabeza de la serpiente, una pitón real o bola, especie que puede alcanzar unas dimensiones de entre 90 centímetros y 1,5 metros de longitud.
Los agentes, según recoge el informe, vieron al animal y su cabeza desprendida junto a la puerta de la entrada de la casa donde se produjo el incidente.
Mayorga enfrenta cargos por crueldad animal con intención de matar, detención ilegal y resistencia a la autoridad.
El individuo permanece detenido en el Centro Correccional Turner Guilford Knight y solo podrá salir si paga una fianza de 15.000 dólares.
La especie de pitón que el sujeto mató, de origen africano y que tiene un peso medio cercano a los 1,5 kilogramos, es utilizada como mascota por algunas personas debido a su temperamento relativamente dócil.
El nombre de pitón bola que se le da en algunos lugares se debe a la costumbre de esta serpiente de enrollarse sobre sí misma y meter la cabeza en el centro, lo que da la idea de una bola.
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