Lo ácido, dulce, salado, picante, amargo y astringente tiene efectos terapéuticos, según la medicina ayurveda.
Cada sabor estimula el cuerpo y ayuda a prevenir las enfermedades:
Ácido: estimula el apetito, facilita la digestión y aumenta la energía vital. Se destacan los cítricos, la uva verde y la piña. También se considera de sabores ácidos las leches fermentadas como el yogurt y vinagres, como el de manzana.
Dulce: es muy importante porque ayuda a calmar el sistema nervioso y este el sabor que ayuda bastante para bajar la tensión arterial. Entre las frutas más dulces están la papaya, la patilla, el banano, las uvas pasas y los dátiles. Así mismo, hortalizas como la zanahoria y la remolacha. Recomiendan la miel de abejas, el ajonjolí y las almendras.
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Salado: es el sabor que se debe consumir con más moderación, porque en exceso puedo dañar los riñones.
Amargo: la cúrcuma, la berenjena, la espinaca, la sábila y el diente de león se clasifican como de sabor amargo y tienen un efecto desintoxicante.
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Picante: el ají, el rábano y especias como las pimientas negras y cayena; el clavo, la canela y el jengibre son de este sabor. Este ayuda a asimilar los alimentos, favorece la digestión y contribuye a elevar las defensas.
Astringente: el té verde, las coles, las lentejas, la pera y la manzana. Estos ayudan a quemar la grasa y controlar el peso.
Tenga presente que hay alimentos con dos o más sabores. Por ejemplo, la canela es de sabor picante, dulce y astringente. El de la papa blanca es dulce, salado y astringente. El ajo, descrito como picante, tiene todos los sabores menos el ácido.
Sin duda, en la variedad está el placer. Conozca su cuerpo y siempre prefiera aquellos sabores que le brinden bienestar.
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Para mayor información Dr. Jeffin Kakkassey, médico ayurveda de Naturveda, teléfono 7550960.