Niños de Soledad se salvaron de consumirlos porque sus madres se dieron cuenta del verdadero estado de los alimentos cuando iban a prepararlos.
En los empaques se evidencia que hay un sticker pegado sobre la fecha de vencimiento de los alimentos que distribuyeron a los beneficiarios de los centros de desarrollo infantil.
Mientras que en el papel se leía que vencía en noviembre de 2021, en la bolsa decía que podía consumirse hasta noviembre del año pasado.
Además, las familias denuncian que el contratista empacó en bolsas de alpiste para pájaros las lentejas o los fríjoles.
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“Entregar alimentos vencidos es causal de pésima conducta, vamos a poner hoy mismo en conocimiento de los órganos de control esta situación anómala que se presentó en nuestro municipio”, dijo Rodolfo Ucrós, alcalde de Soledad.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar también inició una investigación y ordenó al contratista el retiro y reemplazo inmediato de los productos.
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Según Benjamín Collante, director del ICBF Atlántico, la fundación que entregó estos alimentos ya les suministró documentos como facturas y certificaciones de la Secretaría de Salud.
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