La familia, conformada por una pareja y siete menores de edad, llevaba cinco días viviendo en la terminal de transportes de Bogotá.
Según María Arrollo, madre de la familia, un grupo paramilitar en Jamundí, Valle, los amenazó con acabar con sus vidas y los obligó a desplazarse.
Huyendo de las amenazas, llegaron a Bogotá y ante la negativa de los entes de Gobierno, según ellos, no tuvieron otra opción que refugiar a sus hijos en los pasillos de la terminal de buses.
Algunos trabajadores del lugar facilitan comida para la familia desprotegida.
Luego del informe del Ojo de la Noche, de Noticias Caracol, la mujer y su familia recibieron apoyo gubernamental y ofertas para mejorar su calidad de vida.
Updated: abril 09, 2015 06:50 p. m.