Doce exmilitares del batallón La Popa, involucrados en 127 falsos positivos, comparecen ante la JEP en una audiencia de reconocimiento que se adelanta en Valledupar, la cual hace parte del subcaso costa Caribe y a la que también asisten miembros de comunidades indígenas.
El magistrado Óscar Parra detalló que tres oficiales, "los coroneles retirados Publio Hernán Mejía Gutiérrez y Juan Carlos Figueroa Suárez, y el teniente coronel retirado José Pastor Luis Mahecha, manifestaron su decisión de no aceptar su responsabilidad; incluso este último ha cuestionado la competencia de la Jurisdicción Especial para la Paz, por lo que su situación será resuelta por trámite adversarial que impulsa la unidad de investigación y acusación de la jurisdicción”.
Por su parte, Eduardo Cifuentes Muñoz, presidente de la JEP, explicó cómo actuaron los militares en los casos de falsos positivos.
“Este patrón se caracterizó por la existencia de una organización sofisticada para poder presentar esos homicidios como bajas en combate, lo cual comenzaba en las labores de inteligencia que eran falsas y culminaban con la aplicación de lo que se denominó el kit de legalización, esto es la fabricación de las pruebas para poder hacer pasar estos actos como si fueran bajas en combate”, dijo.
Autoridades de los pueblos indígenas wiwas y kankuamos asisten a la diligencia, pero el concejal Pedro Loperena afirma que para su pueblo se registraron “50 ejecuciones extrajudiciales, doctor Cifuentes. En esta audiencia solo aparecen tres. Sur de La Guajira, 50 ejecuciones extrajudiciales, las cuales están reportadas y debe hacerse la audiencia para el pueblo wiwa”.
En cuanto a los kankuamos, su comunidad considera que los falsos positivos hacían parte de una estrategia de “genocidio étnico, tanto físico como cultural”.
“Evidencia de ello son los más de 400 miembros del pueblo kankuamo asesinados, incluyendo decenas de ellos presentados ilegítimamente como bajas en combate y mal llamados falsos positivos, así como los más de 60 casos de desaparición forzada y más del 40% de la población kankuama desplazada”, añadió.