La muerte de los trabajadores se presentó cuando se desprendió el techo de la mina de carbón en el sector conocido como "Minitas" a pocos metros de la vía que comunica a los municipios de Amagá y Angelópolis.
Los cuerpos de los mineros Carlos Alirio Londoño, de 54 años, y Luis Ferney Gaviria, de 34 años, fueron rescatados a 400 metros de la bocatoma y trasladados a la sede de Medicina Legal.