El alto tribunal defendió el derecho de toda mujer trabajadora a quedar embarazada y a no ser despedida de su puesto, y a que, además, se le pague su licencia de maternidad.
El fallo ampara a las mujeres con contratos de prestación de servicios, temporales y de cooperativismo, entre otros.
El organismo advierte que las mujeres en estado de gestación deben gozar de las mismas garantías que las que tienen un contrato laboral formal.
El pronunciamiento fue hecho al conceder las tutelas de 33 mujeres en embarazo que fueron despedidas de sus trabajos de forma ilegal.