No les importó la cuarentena ni el toque de queda en Piedecuesta. Iban muy junticos y llevaban comida, 'chingue' y hasta carpas. ¡Irresponsables!
Las autoridades de Santander fueron alertadas sobre la presencia, en la quebrada Golondrina, de un grupo de personas que no estaba respetando el aislamiento obligatorio que rige en Colombia por el coronavirus.
Al llegar al sitio, la Policía se llevó una sorpresa: se trataba de ciudadanos inconcientes que, poniendo en riesgo su salud y la de la comunidad en general, se encontraban realizando un paseo de río.
Una de las cosas que más los indignó a los uniformados fue encontrar allí a varios menores de edad. Es decir, a los adultos no les interesó el bienestar de los pequeños y también los expusieron al COVID-19.
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Los infractores fueron multados por violar la medida sanitaria.
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