Las internas, que lloraron frente a los estudiantes al contarles sus historias, fueron becadas para que empiecen a cumplir sus sueños.
Fueron estudiantes de cinco instituciones de Manizales los que escucharon a detenidas como Claudia Patricia y María Camila, que hoy pagan condenas de 19 y 5 años cada una.
"Me tiré mi vida porque perdí toda mi juventud en una cárcel debido a mis malos actos e intolerancia", les dijo Claudia a los jóvenes.
María Camila, por su parte, fue enfática en decirles que su única verdadera amiga “es la mamá, ella siempre está con uno, siempre quiere lo mejor para uno”.
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Los testimonios de vida de estas dos mujeres hacen parte de la campaña ‘Delinquir no paga’ que adelantan las autoridades en la capital de Caldas.
Hernando Peláez, secretario de Gobierno de Manizales, sostiene que los testimonios de quienes están privados de la libertad buscan "tocarles el corazón (a los jóvenes) con experiencias de vida reales y también fortalecer a estas personas que en algún momento cometieron un error".
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